miércoles, enero 24, 2007

DESPEDIDA


Como lo intuí, jamás volvió. Alguien me dijo que no abrigara esperanzas, que los ángeles por eso son ángeles, porque no vuelven, porque están allá muy lejos según eso pendientes de ti, pero en realidad se dedican a jugar. No olvides, me recordaron, que son niños y sólo piensan en sí mismos.

Yo no quería aceptarlo. Guardaba aún, no sé porqué, una remota esperanza. Acaso porque la había mantenido siempre o tal vez porque cuando se presentó me pareció tan sincero, tan noble, tan cercano a mi...que hasta llegué a creer que era el mío. Sí era un niño, pero eso no me sorprendió porque sé que los ángeles son niños y los niños son ángeles, aunque también me han dicho que hay algunos que se conservan así todo el tiempo hasta llegar a viejos. O será porque necesito tanto de un ángel que no quiero resignarme...no.

Luego, de tanto meditar, de tanto soñar, de tanto anhelar...me cansé. Vagué sin rumbo y sin destino por un minuto o unos días dejando que fuera mi inconsciente quien me llevara a donde quisiera. Nunca lo había hecho. Sentí una rara serenidad al percatarme de que no sabía a dónde ibamos mi mente, mi espíritu, mi alma y yo. Por eso, felizmente perdí la noción del tiempo, del espacio y casi de todo. Pero lo que sí recuerdo son los muros y los pisos que me dieron abrigo, los parroquianos que compadecidamente me escucharon; la luna, que siempre ha sido mi cómplice, y el lucero aquel, otrora cruel, ahora amigo y faro benévolo.

Mi dolor menguó con aquel trajinar, seguro de que con el tiempo quedará atrás. Ignoro cómo llegué a mi refugio, el cual pude reconocer sólo cuando me acerqué a la ventana, atalaya amada desde la que he contemplado tempestades y desiertos, virtudes y ocios, días y noches, amores y desamores. Sólo así supe que había vuelto y desde aquí digo adiós a quien, jugando, vino a mi, oculto ya en un batir de alas tras de la Estrella Polar.


No hay comentarios.:


Acerca de mí

Nací un martes 13 exactamente a las 00.13 y alguien dijo que por eso estaba emparentado con un ángel desalojado del Paraíso. Tal vez...